¿Qué queda de la revolución del Mayo del 68?
Mayo del 68 constituyó una formidable interrupción de la "normalidad democrática", es decir , del secuestro cotidiano de la palabra y de la política a manos de los partidos, los media, la cultura hegemónica, etc..Por tanto , resultaría ingenuo pensar que ese mismo sistema cuestionado no iba a tratar en adelante de borrar, tergiversar y banalizar aquel recuerdo. Ese profundo "odio" al 68 explica la mayor parte de lo que se escribe en su 40 aniversario. Finalmente, conservadores y socialdemócratas están de acuerdo, aunque su valoración sea distinta: Mayo del 68 fue un asunto de liberación de las costumbres y las mentalidades, sus efectos están ya incorporados en nuestras sociedades. Por el contrario una memoria viva del 68 pasa por rescatar una dimensión política del movimiento, es decir su cuestionamiento directos de la sociedad, la función del saber (los estudiantes) o del trabajo (los trabajadores), las nuevas relaciones que establecemos... Ese Mayo desconocido, puede hablar e interpelar hoy a quien no sólo desee legitimar el presente (la democracia- mercado como marco exclusivo de la vida en común) sino buscar espacios de lo político fuera, al margen y contra la política instituída. Como un recuerdo vivo de que lo político no tiene propietario, sino que es una expresión accesible a cualquiera, de que el pensamiento no es monopolio de ninguna élite de intelectuales, sino una capacidad del común de los mortales y de que la expresión, no es una prerrogativa de los media sino una posibilidad creadora abierta a todos.
"¡SEAMOS REALISTAS, PIDAMOS LO IMPOSIBLE!"
3 comentarios
Fausto Mangenés D´elfinez -
Gracias.
Fausto M. D´elfinez. Montauban, 2008.
Elpollodegoma -
Mayo molaba caray :). Ah, y todo eso del asunto social y político también está bien eh. Pero donde se ponga la hermosa sensación del veranito en ciernes... Qué recuerdos caray.
Buen post maja, un placer leerte. Y recuerdos desde Villalpedrete de Odón :D.
Galego -